Santo Domingo, RD – Con profundo dolor y consternación, el país recibe la triste noticia del fallecimiento del icónico cantante dominicano Rubby Pérez, quien fue encontrado sin vida entre los escombros del colapsado techo de la discoteca Jet Set, luego de intensas horas de búsqueda.

El trágico suceso ocurrió durante la noche del sábado, mientras más de 500 personas disfrutaban de un concierto en el reconocido establecimiento capitalino. Según informaron las autoridades, el desplome dejó al menos 51 personas fallecidas, entre ellas el intérprete de tantos himnos de la música tropical.
La incertidumbre marcó las horas posteriores al accidente. En un primer momento, la hija de Rubby Pérez declaró que había sido hallado con vida y trasladado a un centro de salud, aunque nunca se confirmó a cuál. Poco después, un hermano del artista contradijo esa versión, asegurando que Rubby aún se encontraba desaparecido bajo los escombros.
Minutos antes de esta publicación, las autoridades confirmaron oficialmente su deceso, provocando una ola de dolor entre fanáticos, colegas y figuras públicas. Las redes sociales se han llenado de mensajes de despedida y homenajes al hombre que con su voz y carisma se ganó el corazón de toda una nación.
Un legado imborrable: ¿Quién fue Rubby Pérez?
Nacido el 8 de marzo de 1956 en Santo Domingo, Rubby Pérez (nombre real: Roberto Antonio Pérez Herrera) fue un cantante dominicano de merengue, reconocido a nivel internacional por su voz potente y su entrega escénica. Alcanzó la fama como parte de la orquesta de Wilfrido Vargas y luego emprendió una exitosa carrera como solista, cosechando éxitos como “Buscando tus besos”, “Hazme olvidarla”, “Enamorado de ella”, y muchos más.
Rubby también fue un símbolo de superación. Tras perder una pierna en un accidente automovilístico cuando era joven, nunca permitió que eso lo detuviera. Su vida y carrera fueron ejemplo de resiliencia, pasión y compromiso con la música.

Un adiós difícil de aceptar
La música dominicana está de luto. El mundo pierde hoy no solo a un artista talentoso, sino a un ser humano excepcional, querido por todos quienes tuvieron el privilegio de conocerlo o de vibrar con su música. Descansa en paz, Rubby.
Tu voz vivirá para siempre en el alma del pueblo dominicano. 🖤🇩🇴